La fresa, esa pequeña fruta de color rojo intenso y delicioso sabor, es nuestra mejor defensa para combatir a los radicales libres que dañan la estructura de las células y son los causantes del envejecimiento y de algunas enfermedades que atacan a nuestro organismo.
Todas las frutas tienen propiedades antioxidantes, pero según investigaciones realizadas por científicos norteamericanos, la fresa es la que contiene mayor concentración de los tres principales antioxidantes: el betacaroteno (provitamina A), vitamina C y vitamina E.
Estas frutas poseen propiedades revitalizantes y antioxidantes. Aportan poca cantidad de azúcar y son altas en fibra, por lo que constituyen un buen ingrediente para regímenes adelgazantes o para dietas de personas diabéticas.
También la cosmética ha sabido aprovechar sus beneficios contra las arrugas, problemas de la piel o para calmar los efectos de la insolación. Sus hojas y pulpa se utilizan en mascarillas naturales.
La mascarilla casera de fresa es otra de esas magníficas opciones, que tienes a tu disposición, para luchar contra la grasitud de tu piel. Las propiedades de la fresa, ideales por su acidez para balancear el sebo de tu cutis, vendrán de maravillas para realizar este truco casero, sencillo y efectivo.
La mascarilla casera de fresa es una de las tantas opciones para tu rostro, que puedes poner en práctica si tu piel es grasa.
Las fresas son frutas que tienen un dejo de acidez, ideal para oficiar de tónico para tu cutis graso. Por eso mismo, sólo tienes que conseguir estos ingredientes y poner manos a la obra.
Antioxidantes
as fresas ayudan a eliminar los radicales libres, lo que hace más lento el envejecimiento del organismo. Se ha comprobado que a las personas mayores que comen fresas frecuentemente les aparecen arrugas, cicatrices y marcas cutáneas más tarde que a aquellos que no la consumen.
- Protectora de la piel: Tiene una gran capacidad antibacteriana para los problemas externos de la piel, esto debido a la sustancia astringente que posee. Gracias a sus tres antioxidantes, protege a las células, evitando una vejez prematura. Las compañías de estética utilizan es preciada fruta para producir mascarillas de belleza rejuvenecedoras.
Receta:
Mascarilla de fresas y miel
Ingredientes
7 fresas
2 cucharadas de miel.
Modo de aplicación
Lavar y cortar las fresas. Luego ir agregando, poco a poco, la miel mientras se aplasta las fresas con un tenedor.
Una vez se logre un puré, esparcir esta mascarilla sobre el rostro. Dejar actuar durante 20 minutos y retirar con agua fría.